Todo lo que has de saber sobre los galgos

Son muchas las razas de perros que cada vez se dejan ver más por las calles. Hoy hablaremos de una de ellas: los galgos. Sea cual sea la hora a la que salgas, lo más probable es que te cruces con varios de estos perros que tanto gustan a sus dueños. Pero, ¿por qué?

El aspecto visual, varios factores a nivel físico y su carácter son algunos de los motivos que dan pie a que los galgos estén tan bien considerados. Seguidamente detallaremos algunos de los puntos más importantes.

Físico

Son numerosas las razas de perro que cuentan con una especie de capa que actúa como aislante. Es conocida bajo el nombre de subpelo, encargándose de repeler tanto la humedad como el frío. Desafortunadamente, los galgos no tienen esta característica física.

Es lo primero que hay que saber respecto a los galgos. Y es que algunos dueños cometen el error de no abrigarles bien ahora que llegan las bajas temperaturas. En tal caso, lo pasan realmente mal, puesto que a la falta de dicha capa se suma el hecho de que almacenan menos grasa, la cual es esencial para que la temperatura del cuerpo sea óptima.

Basta con echar un vistazo a cualquier galgo para darse cuenta de que la grasa es sustituida por fibra, aspecto que no sorprende teniendo en cuenta que es una raza puramente corredora. Es decir, adquiere una mayor relevancia si lo comparamos con la grasa.

¿Qué pasa con uno perros que no tienen subpelo y cuentan con menos grasa comparándolos con otras razas? El frío se apodera de ellos, pero esto no significa que tengan que pasarlo mal en pleno invierno y en otras épocas del año como la otoñal. Estar abrigados es una necesidad que puedes satisfacer fácilmente adquiriendo un abrigo.

Los típicos temblores provocados por el frío pasan a ser historia al proporcionarles uno de estos abrigos para galgos, los cuales mejoran su bienestar e incluso aportan un plus en términos visuales, ya que son prendas con un gran estilo.

Seguimos hablando del físico para profundizar ahora en su constitución. Llama poderosamente la atención la fortaleza de la misma, teniendo en cuenta que el peso no suele exceder los 32 kilos. Para un perro de máximo 76 centímetros, es una cifra que podría considerarse baja, pero lo cierto es que están perfectamente proporcionados.

Como es habitual, las hembras ven reducidas las cifras que acabamos de dar. Algunas de ellas tan solo llegan a los 69 centímetros, mientras que el peso mínimo se sitúa en 27 kilos. Independientemente de si se trata de un galgo macho o una hembra, es posible dar con perros de esta raza de multitud de colores: blancos, negros, texturas atigradas y un largo etcétera.

¿Recuerdas que antes hemos hablado de estilo al sacar a colación la importancia que adquieren los abrigos? En este factor se fijan mucho los dueños de galgos. Y no es para menos, puesto que quieren preservar otra característica física de esta raza: estamos ante unos de los perros más elegantes de todos los que existen.

La elegancia contrasta con la rapidez. Algunos de ellos, concretamente los galgos ingleses, pueden superar los 70 kilómetros por hora. Así pues, no es de extrañar que esta raza llame tantísimo la atención de los amantes de los perros, quienes también se ven atraídos por dichos canes debido a su carácter.

Carácter

Ha llegado el momento de profundizar en el carácter de los galgos. Habiendo mencionado recientemente lo rápidos que son, tal vez creas que han de estar constantemente corriendo o realizando algún tipo de actividad física, pero nada más lejos de la realidad.

La forma de ser del galgo es bastante tranquila. Puede estar horas en una casa o un piso simplemente descansando. Eso sí, requiere su paseo diario, el cual ha de ser bastante activo para que consuma la energía necesaria.

Al sacarlos a pasear, los galgos no hacen gala de un fuerte componente de sociabilidad, sino más bien todo lo contrario. Es decir, si un extraño se acerca para saludar e incluso acariciarles, no acostumbra a hacerles demasiada gracia. Lo mismo podemos decir de otros perros que hagan acto de presencia en el lugar. Eso sí, el escenario cambia por completo en su propia casa.

Con la familia que cuida de él se muestra muy sociable a la par que cariñoso. Habiendo más perros en el domicilio, no se produce problema alguno, aunque los gatos sí pueden generar algún que otro contratiempo. Esto es debido a que la raza es cazadora.

Ahora que ya conoces cómo son los galgos, tal vez tengas en mente hacerte con uno. Si es así, has de saber que no son muy recomendables para personas que nunca han tenido un perro, pero tampoco es necesario contar con conocimientos avanzados. Lo más importante es que lo eduques bien y le des diariamente la dosis de ejercicio físico que necesita.